El Black Friday regresa este 28 de noviembre y expertos advierten: muchas “ofertas”
esconden precios inflados y urgencias falsas que buscan presionar al consumidor.
Michiel Das, académico de EAE Business School, entrega consejos claros para
identificar descuentos auténticos y aprovechar el Black Friday de manera informada,
cuidando el bolsillo y evitando caer en promociones engañosas.
El próximo 28 de noviembre se realizará una nueva edición del Black Friday, la jornada
de compras más masiva del año. Miles de consumidores esperan aprovechar rebajas que
prometen ser históricas, pero detrás de los carteles de “imperdible” y “última
oportunidad” se esconden prácticas que pueden poner en riesgo el bolsillo y la
confianza del comprador.
De acuerdo con Michiel Das, docente y experto de EAE Business School, perteneciente
a la red de educación superior Planeta Formación y Universidades, muchas de las
ofertas que circulan en estas fechas responden a estrategias de manipulación comercial
más que a verdaderos descuentos. “Un consumidor que descubre que fue engañado
difícilmente vuelve a comprar. La confianza se construye con coherencia y se pierde
con una sola mala práctica”, advierte.
Estrategias frecuentes de engaño
Subir el precio antes de la campaña: se aumenta artificialmente el valor semanas
previas y luego se anuncia un supuesto descuento que solo devuelve el producto a su
precio original.
Precios de referencia ficticios: se inventa un “antes” inflado para que el “ahora”
parezca una ganga.
Urgencia artificial: mensajes como “solo por hoy” o “últimas unidades” buscan activar
el miedo a perder la oportunidad, aunque el stock sea abundante.
Bundles poco transparentes: combos de productos que aparentan un ahorro mayor al
real.
Falsas nuevas versiones: se lanza un modelo apenas modificado para justificar un
precio más alto y aplicar un descuento aparente.
Cómo detectar rebajas genuinas
El experto recomienda cuatro pasos simples para protegerse:
Revisar la estabilidad del precio en el tiempo.
Analizar la credibilidad del descuento según el tipo de producto.
Comparar en distintas tiendas para evitar rebajas coordinadas.
Observar qué ocurre después de la campaña: si el precio se mantiene o baja aún más.
Además, herramientas como Google Shopping o extensiones como Keepa para Amazon
permiten verificar si un producto realmente bajó de precio o solo volvió a su valor
anterior.
Un examen de confianza para las marcas
El Black Friday es una oportunidad para dinamizar el comercio y ofrecer verdaderos
beneficios al consumidor. Pero también es un momento crítico para la reputación de las
marcas. “Los comercios deben entender que un engaño puede ser fatal para su
credibilidad. La transparencia es la mejor estrategia para fidelizar clientes”, subraya
Das.
Con millones de chilenos atentos a las ofertas, esta temporada de descuentos se
convierte en un examen de confianza para las empresas. La invitación es clara:
informarse, comparar y planificar antes de comprar. Solo así el Black Friday será
realmente una fiesta del consumo responsable y no una trampa disfrazada de
oportunidad.








